Hace mucho que no posteo y creo que este es un momento ideal, viajando por la autopista en el auto de mi jefe camino a la facultad. Día: jueves, hora: 19.55. Día largo, ese no se discute. Preocupado por los tiempos, las responsabilidades y los deseos. Ganas de estudiar (hace mucho que no tengo ganas, pero hoy más que nunca) y tratando de rascar tiempo para ello, esperando algún feriado para tener un poco de vida social, pero no todas son malas. Aún tengo ganas de seguir caminando hacia adelante.
La autopista esta fluida, aunque se nota que mucha gente sale tarde del trabajo, quizá no soy el único. Últimamente siento que las semanas pasan mucho más rápido de lo que estoy acostumbrado, y los fines de semana no son la excepción, a veces me llama a replantearme un poco como utilizo mi tiempo. Quizá debería pensar en laburar un poco menos y dedicar un poco más de tiempo a mis amigos, a disfrutar, a liberar mi ello que lo tengo bastante limitado porque el trabajo te lleva a ser un profesional, a ser responsable, a que tu superyó sea el que te gobierne. Me encanta lo que hago y me encanta que me paguen por ello, pero también la vida esta para disfrutarla y en ese aspecto hace tiempo que me debo unas vacaciones... algún día.
Al llegar a casa se me presentó la historia del vecino, duerme a lo sumo 5hs por día. Siempre estudiando, trabajando, progresando; lo cual me lleva a pensar que estoy viendo mi problema más grande de lo que realmente es.
Lamentablemente, por más duro que trabaje el éxito se logra con una pequeña decisión, un Si o un No en el lugar correcto, en el momento justo. Es difícil decidir bien, ser conservador, ser arriesgado, es una simple desición en el momento justo y en el lugar correcto.
Nadie va a esforzarse por nosotros más que nosotros mismo, siempre se puede un poco más.
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